
EVALUACIÓN DE LAS CARACTERÍSTICAS
FISICOQUÍMICAS DE YOGURT CON
PROBIÓTICO Bidobacterium spp.
FORMULADO CON JALEA DE UVILLA Y
HARINA DE QUINUA
.............................................................................................................................................................................................................................................................
Cómo citar este artículo:
Estrella, F., Anchundia, M., & Yambay, J. (Julio - diciembre de 2021). Evaluación de las características sicoquímicas de yogurt con probiótico bidobacterium spp. formulado con jalea de
uvilla y harina de quinua. Sathiri (16)2, 108-121. https://doi.org/10.32645/13906925.1075
117
quinua (Chenopodium quinoa Wild) en las características sensoriales de un yogurt probiótico”, en
relacion al tratamiento más aceptado que contiene 10 % de extracto de quinua con valores de pH
4,49 y acidez 0,69 %.
Solorza (1991) maniesta que el pH del yogurt elaborado con distintos niveles de harina
de quinua registró entre 4,0 a 4,50; esta propiedad ácida conere al proceso de elaboración en
base a la inoculación e incubación debido a la adición de bacterias lácticas Lactobacillus bulgaricus
y Streptococcus thermophilus, las mismas que son aromatizantes y acidicantes.
Según Walstra, Geurts, Noomen, Jellena y Van (2001), los valores de pH están comprendidos
entre 4,1 como mínimo y 4,6 como máximo, en cuanto al porcentaje de ácido láctico según el
Decreto Supremo N° 007-2017-MINAGRI, “Reglamento de la leche y productos lácteos”, “Artículo 20
Especicaciones técnicas”, el cual establece que la acidez del yogurt entero debe ser como mínimo
0,6 % de ácido láctico; de acuerdo a estos valores tanto el pH como la acidez (% de ácido láctico)
del yogurt con probiótico formulado con harina de quinua y jalea de uvilla se encuentra dentro del
rango establecido.
El porcentaje de sólidos totales del yogurt con probiótico Bidobacterium spp. formulado con
jalea de uvilla y harina de quinua es de 23,47 %, presentando una diferencia al valor del yogurt base
el cual es de 14,36 %, este aumento de sólidos totales se debe a la adición de harina de quinua y jalea
de uvilla. Estos resultados muestran similitud con los obtenidos por Obregón (2018) con 17,84 %,
Camán y Vilca (2016) con 20,2 %, Curti et al. (2017) con 20,5 y Hualpa (2015) con 25,3 %.
El contenido de proteína y grasa del yogurt con harina de quinua y jalea de uvilla es de
3,23 % y 2,88 % respectivamente, los cuales muestran diferencia en relación al yogurt base con
valores de 2,94 % proteína y 2,48 % grasa; por otro lado, según la Norma Técnica Ecuatoriana
NTE INEN 2395:2011 y el Decreto Supremo N° 007-2017-MINAGRI, el porcentaje de proteína y
grasa del yogurt debe ser como mínimo 2,7 % y 2,5 % respectivamente; de acuerdo con estos
valores el yogurt con adición de quinua y uvilla y el yogurt base se encuentran dentro de los rangos
establecidos.
Los resultados del contenido de proteína que se obtuvieron en la presente investigación
muestran similitud a los reportados por Hualpa (2015) con 3,02 %, Beltrán (2018) con 3,5 %, Ojeda
(2010) con 3,68 % y Obregón (2018) con 4,52 %, sin embargo, este valor es inferior al reportado por
Camán y Vilca (2016), el cual es de 5,9 % y por Curti et al. (2017) que es de 6 % de proteína.
En lo que respecta al contenido de grasa, los reportes son los siguientes: según Beltrán
(2018) es de 2,8 %; y según Camán y Vilca (2016) es 2,0 %; dichos resultados son similares a los
obtenidos; no obstante, los valores, según Hualpa (2015), que es 3,16 %, Obregón (2018) con 3,76
%, Curti et al. (2017) con 3,8 %, Ojeda (2010) con 3,84 %, presentan mayor contenido de grasa
debido a la cantidad de harina de quinua adicionada a la leche.
En cuanto al contenido de ceniza, el yogurt con adición de quinua y jalea de uvilla es de
0,79 %, el mismo que muestra una diferencia en relación al yogurt base, que es de 0,72 %; por otra
parte, según los reportes de Hualpa (2015) con 0,78 %, Obregón (2018) con 0,74 %, Camán y Vilca
(2016) con 0,7 % de ceniza, son similares al resultado obtenido en el mejor tratamiento, aunque, el
valor obtenido por Curti et al. (2017) que es de 0,81 %, es superior a pesar de que el contenido de
harina de quinua adicionado fue de 1 g en 100 mL-1 de leche.