
70
Cómo citar este artículo:
Perugachi, L. & Morocho, J. (Julio - diciembre de 2022). La vinculación con la sociedad y su contribución al desarrollo de la Cámara de Comercio de Otavalo.
Sathiri (17),2 67-80. https://doi.org/10.32645/13906925.1131
Finalidad de la vinculación. La vinculación, universidad, empresa tienen la nalidad de
transferir el conocimiento y tecnología, que son los insumos de la economía de un país
o región. La relación entre estos actores es fundamental, pues en las aulas universitarias
se generan conocimientos que demandan las empresas para solucionar sus problemas y
necesidades (Altamirano, 2016). En Latinoamérica, la creciente presencia de empresas en
los mercados exige que las universidades creen centros de desarrollo cientíco y tecnológico
donde se generen nuevos conocimientos que permitan a la industria innovar en sus procesos
productivos a menores costos. Es por ello que toda actividad curricular donde involucre al
estudiante con los sectores productivos fortalece su relación y el compromiso de elevar la
calidad en la educación y en sus investigaciones para contribuir en el desarrollo y progreso
de la sociedad (Bautista, 2014).
Limitantes en la vinculación con la sociedad. La escasa o nula comunicación entre la universidad
y el sector productivo ha impedido que los proyectos cientícos y tecnológicos generados en
las instituciones de educación superior se orienten a solucionar problemas que retrasan la
dinámica de los procesos productivos (Brito, Gordillo, & Quezada, 2016). Del mismo modo, el
sector empresarial al guardar el secreto en cuanto a sus formas de producción es renuente
a dar a conocer sus problemas que le aquejan, lo que hace que la universidad no pueda
mantener sus líneas de investigación alineadas a solucionar la problemática de los distintos
sectores productivos. A más de ello, las diferencias culturales del entorno social han provocado
un distanciamiento en el pasado, que en el presente se está tratando de corregir y retomar
las acciones para las cuales fueron creadas cada entidad (Malagón, 2016). Hay que reconocer
que la academia prerió en el pasado trabajar en proyectos a largo plazo, mientras que a las
empresa les urgía dar solución sus problemas a corto plazo, esto provocó un distanciamiento
que paulatinamente se está regulando.
Éxito de la vinculación. Las innovaciones académicas en un mundo globalizado han permitido
que la universidad adquiera un mayor protagonismo como agente de desarrollo en la sociedad
y adopte funciones que trascienden en el campo de la docencia y la investigación. No obstante,
en América Latina la universidad ha exhibido una dinámica diferente, producto no sólo de su
trayectoria evolutiva sino también de las características del entorno en el que se encuentra
(Rodríguez & Rojas, 2014). Las universidades que realizan la vinculación han experimentado
cambios importantes en su quehacer, porque se han dado cuenta que no pueden funcionar
como islas, pues ello provoca retraso en el desarrollo del conocimiento y cuando se integran
se benecian, tanto en la producción del conocimiento como en la mejora de los servicios que
éstas instituciones prestan a la sociedad. En consecuencia, debemos considerar que el éxito de
la vinculación radica en una investigación donde interactúe la sociedad y la universidad, puesto
que ambos cumplen roles especícos que fusionados promueven el desarrollo de las empresas
y de un país (Gonzaga, 2019).
Benecios para los sectores productivos. Los tiempos actuales cuestionan cómo será el futuro
a mediano y largo plazo, cómo se reactivará la economía y cómo cambiarán las actividades
laborales y profesionales en los distintos ámbitos de nuestro entorno; son muchas las dudas,
pero debe ser precisamente la investigación quién de respuestas a estas preguntas las que sirvan
de guía para hacer lo propio, prepararse, capacitarse y poder reducir la problemática social, en
la medida de lo posible, ante una creciente competitividad laboral (Revista Contribuciones a las
Ciencias Sociales, 2016).